Con el fin de identificar los puntos sensibles en la renegociación del TLCAN, Manuel Herrera, presidente de la Concamin, indicó que los empresarios que integran el "Cuarto de Junto" han celebrado ya su primera reunión.
Mientras los secretarios de Comercio y Relaciones Exteriores cumplían en Estados Unidos su misión con el primer acercamiento negociador de la política bilateral, en México los empresarios de diversos sectores tuvieron su primera reunión ya en la era Trump, con el llamado “Cuarto de Junto”, comentó Manuel Herrera Vega, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Esto, dijo, para identificar los puntos sensibles en la reapertura del TLCAN. Encabezado en el sector privado por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y Concamin, el “Cuarto de Junto” – los negociadores que acompañarán al gobierno federal en la discusión de un nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá- ha estado trabajando ya preparándose y este miércoles tuvieron su primera reunión en la que se convocó a todos los sectores.
“Para saber los puntos más sensibles que pudieran surgir de la negociación y eso se estará haciendo de manera permanente”, dijo el líder de los industriales.
En entrevista telefónica con El Financiero, explicó que existe una estructura de expertos de todos los sectores listos para negociar con el asesoramiento de especialistas en el tema.
“Aunque hay una estrategia proteccionista por parte del gobierno estadounidense, hay la expectativa de encontrar coincidencias como la ilegalidad de productos asiáticos que tanto ha afectado a Estados Unidos y también a México”, señaló.
Previo a la partida de los secretarios Luis Videgaray e Ildelfonso Guajardo, los industriales se reunieron la noche del lunes con ellos para manifestarles sus puntos de vista y acordaron que a su regreso tendrían otra reunión de estrategia.
“No vamos a permitir que exista ninguna negociación en donde los mexicanos salgamos perdiendo, tiene que ser una cancha pareja entre ambos países”.
Sobre el anuncio que hizo el presidente Trump de iniciar la construcción del muro, el representante de los industriales de México reiteró su rechazo a la idea de que sea la solución a los profundos problemas que comparten las dos naciones.
“Es una decisión en la que Estados Unidos tiene toda la libertad de hacerlo pero está claro que México no lo va a pagar con nuestros impuestos”, advirtió.
Descartó que se vaya a poder limitar el envío de remesas hacia México y en cuanto a la repatriación de migrantes ilegales, señaló que el Estado Mexicano es responsable de garantizar sea de acuerdo a la ley y con respecto a los derechos humanos.
“Nosotros estamos listos, implementando algunos esquemas que permitan que algunos de los mexicanos que tengan que regresar, puedan encontrar oportunidades en nuestra industria, hay mucha mano de obra capacitada”, puntualizó.