CIUDAD DE MÉXICO. – Entre 2003 y 2015, un trabajador ocupado en el sector formal de la economía ha producido en promedio 394,697 pesos al año, es decir el triple de los 127,488 pesos anuales que generó un trabajador ocupado en la economía informal, calculó Excélsior a partir de datos del reporte “Medición de la Economía Informal” que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Asimismo en el periodo de referencia, la tasa de crecimiento promedio anual de la economía informal fue de 1.7%, que contrasta con el crecimiento total del Producto Interno Bruto (PIB), de 2.6%, y del avance de la producción en el sector formal, que fue de 2.9% promedio anual.
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Las cifras anteriores, que dan evidencia de los resultados de la economía formal, son la razón por la cual diversos analistas han urgido a que se establezca como prioridad nacional reducir los altos niveles de informalidad que existen en el país, como una condición necesaria para mejorar el desarrollo.
Aportación
Los datos del INEGI revelan que en 2015, 23.6% del PIB del país fur generado por el 57.9% de los puestos de trabajo ocupados en la informalidad, lo que dicho en otras palabras significa que de cada 100 pesos producidos en la economía, 76.4 pesos los generan 42.1% de los trabajadores ocupados con acceso a las prestaciones laborales (formales).
Al interior del 23.6% del PIB que genera la economía informal, 11.3 puntos porcentuales se producen dentro de las ocupaciones del “sector informal”, es decir en los negocios que no están registrados ante la autoridad tributaria, y los restantes 12.3 puntos se generan en “otras modalidades de la informalidad”, es decir en ocupaciones dentro de empresas formales pero que no cuentan con acceso a la seguridad social.
Cabe destacar que la participación de la economía informal en el PIB del país ha mantenido una paulatina tendencia a la baja desde 2009, año en que representó 26.8% del PIB, por lo que desde ese año hasta 2015 se ha reducido en 3.2 puntos porcentuales.
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Por sectores
De acuerdo con el reporte del INEGI, el comercio, con una tercera parte del total (33.6%) de la economía informal, es el sector económico que genera la mayor producción dentro del mencionado segmento.
La industria manufacturera, con 17.2% del total; el sector agropecuario, con 10.8%; y el sector de transporte, correo y almacenamiento, con 8.1% del total, son los rubros que siguen al comercio en cuanto a valor agregado dentro de la economía informal total.
Un aspecto que destaca el INEGI es que el crecimiento del valor agregado dentro “otras modalidades de informalidad” mantiene la misma tendencia que el crecimiento total del PIB, lo cual es explicado “por el hecho de que los negocios formales se ven impactados por los fenómenos económicos que llevan a la economía tanto a una recuperación como a una recesión”.
La eficiencia laboral, débil
Por segundo trimestre consecutivo, la productividad laboral del país registró una caída, esta vez de 0.3% en el tercer trimestre del año, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El resultado se debió al retroceso en la producción por hora trabajada en el sector industrial, de 0.8%, que representó el noveno trimestre consecutivo con pérdidas, lo que no pudo ser compensado por los avances en productividad de los sectores agropecuario (1.8%) y de servicios (0.9%).
En la comparación anual, la productividad laboral también cayó en el tercer trimestre, en una magnitud de 1.2%, también el segundo trimestre seguido a la baja a tasa interanual.
Los resultados sobre la productividad laboral sugieren que el crecimiento económico observado en el país está siendo sustentado por la acumulación de mayor mano de obra y de capital, y no por la eficiencia en el uso de estos factores de la producción.
Por sectores económicos, las empresas constructoras, las manufactureras y las de comercio al por mayor fueron las que registraron reducciones anuales en el tercer trimestre; mientras que las del comercio al por menor y las empresas de servicios privados no financieros fueron las que avanzaron.