El Economista. La informalidad laboral reportó en octubre su nivel más bajo al menos desde el 2005 (último registro disponible), al ubicarse en una tasa de 55.3% de la población ocupada, informó Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Respecto al mes anterior, significó una desaceleración de 1.4 puntos porcentuales.
En ese sentido, el Inegi detalló que “esta tasa es inferior a la de septiembre pasado que fue de 56.7%, con series desestacionalizadas; y respecto al año anterior, en el mismo mes, fue menor en 1.5 puntos”.
En tanto, la tasa de desocupación en el país fue de 3.2% de la Población Económica Activa (PEA) proporción ligeramente inferior a la del mes previo (3.3 por ciento).
Por sexo, la tasa de desempleo en los hombres se redujo de 3.1% en septiembre a 3% en octubre de este año, y en las mujeres descendió de 3.7% a 3.5% en igual lapso.
Cabe destacar que la precarización laboral en el décimo mes del año tuvo un incremento; así, la tasa se ubicó en 15.8%, cifra superior a la de 13.7% obtenido en el décimo mes del 2017; lo que representa que 8.5 millones de trabajadores que perciben un majo salario y tienen altas jornadas laborales.
Respecto a la tasa de subocupación, referida al porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda, representó 7% de la PEA.
En su comparación anual, esta tasa fue superior a la del mismo mes del 2017, que cerró en 6.3 por ciento.
El Inegi destacó que la población ocupada alcanzó 96.8% de la PEA durante octubre del 2018. Del total de ocupados, 68.4% opera como trabajador subordinado y remunerado ocupando una plaza o puesto de trabajo; 22.4% trabaja de manera independiente o por su cuenta sin contratar empleados; 4.4% se desempeña en los negocios o en las parcelas familiares, contribuyendo de manera directa a los procesos productivos pero sin un acuerdo de remuneración monetaria, y finalmente, 4.7% son patrones o empleadores.
En el ámbito urbano de alta densidad de población, conformado por 32 ciudades de más de 100,000 habitantes, el trabajo subordinado y remunerado representó 73.9% de la ocupación total; es decir, 5.5 puntos porcentuales más que a nivel nacional.