Un avance de la candidata populista Marine Le Pen generará nuevas presiones para la moneda local.
La ola nacionalista avivada en el mundo es una de las mayores preocupaciones para la recuperación de la economía global y en el caso de México, para el mercado cambiario.
El tema cobra relevancia en un escenario en el que los eventos externos han generado una gran volatilidad para la cotización del peso mexicano, que en las últimas semanas ha sido apuntalado por el programa de coberturas cambiarias del Banco de México (Banxico).
La candidata populista Marine Le Pen, una ‘euroescéptica’, propone un referendo sobre la membresía de Francia en la Unión Europea (UE) y la reintroducción del franco en lugar del euro. Los administradores de fondos coinciden en que las elecciones en Europa están propiciando el riesgo de desintegración, tornándolo en el mayor riesgo en los mercados, de acuerdo con la última encuesta de administradores de fondos BofA Merrill Lynch Global Research.
Un escenario en el que Le Pen tome la delantera puede generar presiones en el tipo de cambio y llevarlo una vez más hacia los 19.50 pesos por dólar, indica la directora de Análsis Económico de Banco Base, Gabriel Siller. En la jornada de este miércoles el tipo de cambio operaba en aldrededor de 19.06 unidades por billete verde.
Una mayor depreciación del peso puede generar más presiones inflacionarias en México. En la primera quincena de febrero los precios al consumidor subieron 4.71%, por arriba de la meta de Banxico de 3% +/- un punto porcentual.
La mayoría de las encuestas arrojan que tanto François Fillon, líder de los republicanos, un partido de centro derecha y Emmanuel Macron, quien encabeza al partido independiente En Marche!, son los candidatos con más probabilidades de alcanzar la victoria. La primera vuelta de las elecciones será el próximo 23 de abril y la segunda el 7 de mayo.
No obstante, Wells Fargo, advierte que si los recientes eventos políticos han enseñado algo es que las encuestas previas a un proceso electoral pueden quedar ampliamente rebasadas y lejos de lo que indicaban.
A finales de junio de 2016 cuando la mayoría de los británicos sorprendieron al mundo al votar por abandonar a la Unión Europea, la Secretaría de Hacienda, encabezada en ese entonces por Luis Videgaray, tuvo que implementar un recorte al gasto público por 31,715 millones de pesos (mdp) con el fin de quitar presión a la deuda total.
Mientras que en noviembre pasado el triunfo de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos generó una conmoción en el mercado cambiario, llevando al dólar hasta los 22 pesos.
Por lo pronto el programa de coberturas cambiarias de Banxico que contempla 20,000 millones de dólares han ayudado a calmar la turbulencia en el mercado mexicano, pero economistas de Capital Economics, dudan que esta intervención prevenga una renovada caída en el peso.
La firma BMI Research indicó en un reporte que en el corto plazo el peso enfrenta importantes riesgos locales, por un lado está el proceso electoral de 2018 en el que las encuestas ponen como puntero al candidato de izquierda Andrés Mnauel López Obrador, a esto se le suma una tasa de inflación en máximos de varios años y el hecho de que el Banco de México ha tendido que subir “agresivamente” su tasa de interés.
“Mientras que López Obrador ha suavizado su retorica comparada con procesos electorales previos, su elección podría ser una señal de un cambio en la trayectoria política tradicionalmente favorable a los negocios (…) Dados estos factores, mantenermos nuestro estimado de (una cotización) promedio de 20.10 pesos y 19.50 para fin de año”, dice BMI Research.
Por: Carmen Luna
Fuente: Expansión