La renegociación del TLCAN entre EU y México plantean cinco posibles escenarios, de los cuales es altamente probable que no pase nada, se dé un cambio radical o que el país vecino se mantenga.
Redacción. La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre Estados Unidos y México plantean cinco posibles escenarios, de los cuales es altamente probable que no pase nada, se dé un cambio radical o que el país vecino se mantenga. Las otras dos tienen que ver con un cambio en las reglas de origen y que la Unión Americana abandone el acuerdo comercial.
El exnegociador del acuerdo comercial trilateral, Luis de la Calle, explicó que el panorama más complicado y en el que plantea un reto es el cambio o una cirugía radical, donde el tiempo y el clima político, por ser años electorales en México y Estados Unidos, juegan en contra.
“Se antoja un poco difícil que un tratado renegociado de gran envergadura pueda ser modificado y aprobado en el 2018”, consideró De la Calle al dictar la conferencia “Trump vs México: desafíos y oportunidades”, en el marco del VIII Seminario Internacional de Inversiones organizado por Compass Group, una firma administradora de fondos de inversión.
Hay urgencia
Si no se aprueba en el 2018, cuando en México se celebrarán elecciones presidenciales, y si se prolonga hasta el 2019 habrá una nueva administración, por eso la urgencia del secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, porque con un acuerdo el peso se apreciaría y ello abre la probabilidad de que gane el Partido Revolucionario Institucional (PRI), actualmente en el poder.
En Estados Unidos históricamente nunca se ha aprobado un Tratado de Libre Comercio en un año electoral.
El ex subsecretario de Negociaciones Comerciales e Internacionales de la Secretaría de Economía dijo que el TLCAN es muy para México y tendrá costos si se da una negociación complicada, aunque Estados Unidos también tiene qué perder porque nuestro país es un mercado relevante para la Unión americana.
“Si vamos a negociar con Estados Unidos y Canadá no podemos llegar a la mesa de negociación a ver qué te pide Estados Unidos, tenemos que llegar con una lista larga de temas que importan para ser más competitivos y con cosas que sabes que políticamente son complicadas en Estados Unidos”, sugirió.
No obstante, reconoció que el principal punto de defensa de México es la simetría del TLCAN, ya que los tres países tienen los mismos derechos y obligaciones, lo cual le impone un reto a Estados Unidos porque si quiere cambiar un capítulo para beneficiarse de alguna condición, también aplicaría para México.
Luis de la Calle explicó que la probabilidad de que no pase nada con las negociaciones aumentará con en el tiempo y si EU decide permanecer se establecería un acuerdo complementario al Tratado en el que no se establezca cambio alguno.
Los otros dos escenarios plantean un “cambio cosmético al TLCAN” que apuntaría a modificaciones en las reglas de origen en Estados Unidos, lo cual es el camino relativamente rápido porque para implementarlas no se requiere la aprobación del Congreso de Estados Unidos.
“La gente cercana a Donald Trump en materia de comercio quisiera que hubiera más contenido de América del Norte en el comercio que hacemos, entonces van a pedirnos hacer más estrictas las reglas de origen”, explicó De la Calle.
Si EU se sale del TLCAN, éste seguirá entre México y Canadá, entonces el viaje más importante del presidente de la República no es a Washington a negociar con la Casa Blanca, sino a Ottawa.
Fuente: El Economista