CIUDAD DE MÉXICO.- Frente a los cambios tributarios en Estados Unidos, la política fiscal en México debe ser creativa, con una reducción gradual en el Impuesto Sobre la Renta (ISR), combinada con modificaciones en los impuestos al consumo, en deducciones y fomento a las pequeñas empresas.
Los líderes de las principales cúpulas privadas coincidieron en que hay tiempo para plantear una Reforma Fiscal antes de que entren en vigor las modificaciones en Estados Unidos y no se pierda atractivo frente a los inversionistas.
CIUDAD DE MÉXICO.- Frente a los cambios tributarios en Estados Unidos, la política fiscal en México debe ser creativa, con una reducción gradual en el Impuesto Sobre la Renta (ISR), combinada con modificaciones en los impuestos al consumo, en deducciones y fomento a las pequeñas empresas.
Los líderes de las principales cúpulas privadas coincidieron en que hay tiempo para plantear una Reforma Fiscal antes de que entren en vigor las modificaciones en Estados Unidos y no se pierda atractivo frente a los inversionistas.
Trato especial
Juan Pablo Castañón, presidente del CCE, dijo que se requiere una política fiscal promotora de las pequeñas y medianas empresas(pymes) para formalizarlas, esto incluye que puedan salir a cotizar en la Bolsa de Valores y sean premiadas cuando realicen inversiones.
Estamos trabajando un marco creativo con la Secretaría de Hacienda, considerando cuál debe ser el entorno fiscal que propicie más crecimiento, generación de empleos y desarrollo para las micro, medianas y pequeñas empresas”.
Para Castañón existe la posibilidad de bajar el ISR, pero no todo se sujeta a esto, sino también en cambios en los gravámenes al consumo y dar condiciones fiscales especiales, de acuerdo con el tamaño de cada negocio.
Adelantó que en la Comisión Fiscal del CCE se discuten las medidas que presentarán al gobierno, por lo que se espera que haya respuesta por parte de la autoridad fiscal frente a los cambios en EU.
La propuesta de Coparmex es que haya una reducción gradual en el impuesto corporativo de un punto porcentual por año, así como una ruta que permita incrementar la base de la recaudación, a partir de una mayor eficiencia y más contribuyentes activos.
Gustavo de Hoyos explicó que la tasa corporativa de 35% actual debe llegar a un nivel cercano al 26%, cambio que debe hacerse año con año.
El empresario acotó que su proyecto es integral, ya que también considera una revisión a de los impuestos indirectos, que se aplican a las personas físicas y las que cobran los gobiernos estatales y municipales, como el predial.
El director general del Comce, Fernando Ruiz Huarte, dijo que además de una modificación al ISR es posible implementar una reforma donde se dé mayor margen a las deducciones, para incentivar las reinversiones y la llegada de capitales foráneos.