El Financiero. Los industriales se manifestaron a favor de la iniciativa que determina que las cámaras empresariales y sus confederaciones deben promover acciones que eviten la comisión de actos de corrupción.
“En la CONCAMIN tenemos muy claro que el combate a la corrupción debe ser de todos: del gobierno, de la sociedad, de los medios, de los empresarios en general. Por lo mismo, aún sin que existiera legislación específica nosotros asumimos nuestro deber con la sociedad y establecimos una Política de Integridad Industrial (PPI)”, señaló Francisco Cervantes Díaz, Presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN).
Reconoció que en el fenómeno de la corrupción, otra cara son las empresas que buscan beneficiarse a través de la obtención de un contrato, gestiones de gobierno o generarse condiciones favorables en contra de la legalidad. La CONCAMIN y sus cámaras y asociaciones están convencidas y comprometidas, a través de sus liderazgos, de poner el ejemplo y aspirar a una industria íntegra.
“ La Confederación por ello cuenta con un gobierno corporativo, tiene instalada la Contraloría Social Empresarial y el pasado 21 de noviembre lanzamos la Política de Integridad Industrial, que busca poner en suerte de los agremiados, modelos de cumplimiento normativo, guías, programas de desarrollo y formación, así como los estándares de certificación que impulsen el desarrollo de las empresas, les permita acceder a nuevos mercados, obtener mejores condiciones de financiamiento y propiciar escenarios de responsabilidad social”, señaló en el posicionamiento enviado.
El presidente de la Concamin señaló que el sector empresarial debe no buscar beneficios en situaciones que la ley no permite y que derivado del Sistema Nacional Anticorrupción hay mayores sanciones para las personas jurídicas en materia penal y administrativa.
Indicó que en el ámbito global, de apertura comercial también marca estándares para prevenir y combatir la corrupción en las relaciones, principalmente entre los tres países del T-MEC, estableciendo la obligatoriedad de contar con sistemas de cumplimiento y anti soborno.
La Política de Integridad Industrial (PPI) de la CONCAMIN, señaló, tiene por objetivo construir un verdadero modelo de prevención y control de riesgos a través del ‘estándar de cumplimiento normativo’, que considera a la persona física y jurídica como parte de la estrategia, construya profesionistas de cumplimiento y que sea un catalizador de la integridad industrial.
“Iniciativas que busquen combatir la corrupción serán adoptadas de inmediato por esta Confederación; hoy tenemos un paso adelante porque estamos convencidos de que podemos incidir en el cambio al que todos aspiramos”, concluyó Cervantes Díaz.