Ante el anuncio del Presidente Andrés Manuel López Obrador, de alistar los llamados “Tianguis del Bienestar”, la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex), la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive) y la Cámara Nacional de la Industria del Calzado (Canaical), pidieron que no se regale la mercancía decomisada por el Gobierno federal sino que se destruya.
En una carta difundida hoy, las tres cámaras externaron su preocupación por el anuncio hecho el pasado 21 de junio, al tiempo que se dijeron listas para apoyar en la destrucción de las mercancías por considerar que las prácticas ilegales por las cuales fueron introducidas tienen un gran impacto negativo en el empleo, inversión y recaudación fiscal.
Las Cámaras que representamos a más de 1 millón 300 empleos directos, estamos en la mejor disposición de ayudar al Gobierno Federal para la destrucción de mercancías ilegales inutilizables que se intentaron introducir al país y que afortunadamente fueron detectadas por los funcionarios de las aduanas mexicanas
Indica la misiva
Preocupa reforma para enviar mercancías ilegales a zonas de bajos recursos
En cuanto a una posible reforma para enviar el resto de las mercancías a zonas de bajos recursos, señalaron que les preocupa que éstas se conviertan en un mercado paralelo al establecido en México de manera formal, el cual debe cumplir con todo tipo de obligaciones arancelarias y fiscales.
Y es que en su opinión, la medida implica legalizar lo que tiene un origen ilegal por lo que al permitir el consumo en México, se entendería que los bienes se internaron de manera legal lo cual contraviene la naturaleza misma de dichos productos.
Apuntaron que se pondría en riesgo a la población porque muchos productos fueron embargados por no cumplir normas de seguridad o salud y pueden ocasionar peligros para la salud humana al haber estado expuestas a plagas o humedad, entre otros factores de riesgo.
“Señor Presidente, nos preocupa la logística en la distribución ya que puede darse el caso de que las mercancías no lleguen realmente a las zonas más pobres y se convierta en un mercado de mercancías a precios no reales en perjuicio de la industria nacional establecida y los empleos que de ella se generan”, agregaron.
Finalmente, las cámaras propusieron un diálogo para generar un convenio y lograr la destrucción expedita de la mercancía y con ello llegar a una solución al tema.