Mientras que la clase política de EE.UU. sigue sin ponerse de acuerdo sobre el muro fronterizo con México, los gigantes de las ventas en línea tienen la mente puesta en todo lo contrario; cómo posicionarse en el país y en el prometedor mercado latinoamericano de ventas en línea.
Si bien en México las compras por internet no han despegado con tanta rapidez que en EE. UU., se espera que, en los próximos tres años, se multipliquen por dos, alcanzando casi los $ 18 mil millones. Las empresas principales Amazon, Walmart y Alibaba, ya están invirtiendo con vistas a conseguir la mayor parte posible del goloso mercado mexicano.
En su pugna por las ventas online, los tres líderes mundiales están creando buenas oportunidades para inversores estadounidenses e internacionales tanto en el mercado de las importaciones como en el de las exportaciones. Independientemente de qué plataforma sea la ganadora, será necesaria una inyección de capital en infraestructura minorista, financiera y logística, para poder sustentar el aumento de flujo de bienes y de servicios.
Apostando a lo grande en México
Si bien MercadoLibre lideró en comercio electrónico en México en 2016, la multinacional argentina ha visto su participación en dicho mercado desplomarse en los últimos cinco años con la llegada de Walmart y de
Amazon, que registró $ 253 millones en ventas en México en 2016, más del doble que el año anterior, según Euromonitor International. En 2017 se prevé que Amazon iguale a MercadoLibre en un 7% de cuota de mercado, siempre según Euromonitor International.
Tanto los gigantes estadounidenses como la empresa china Alibaba, están apostando por México. Allí Amazon acaba de presentar su servicio de transmisión de contenidos onlinepor suscripción y el de envíos gratuitos Amazon Prime. Cerca de la capital, está construyendo un almacén de 1 millón de pies cuadrados, lo que le permitirá triplicar su espacio actual de distribución en el pais.
A finales de 2016, para poder abastecer el mercado de internet, Walmart eCommerce México y América Central (Walmex) anunciaron una inversión de $ 1.3 mil millones en centros de distribución. El presidente de Walmex, Guilherme Loureiro, recalcaba que "México es un país rico en oportunidades".
Alibaba no tiene la intención de quedarse atrás. En septiembre, el gobierno mexicano anunció un acuerdo con el gigante chino con el fin de ayudar a las pequeñas y medianas empresas (Pymes) locales en su expansión a China y otros mercados internacionales, gracias a la plataforma de comercio B2B de la compañía, Alibaba.com. "Al asociarnos con Alibaba, conseguimos expandir las exportaciones de México en China y de manera más amplia en Asia, al tiempo que conseguimos que las pymes mexicanas ganen experiencia sobre comercio electrónico y transfronterizo", dijo el presidente de México, Peña Nieto.
La plataforma local de ventas por internet Linio completa el plantel de principales agentes del mercado mexicano. A principios de año, Linio financió $ 55 millones para sus planes de crecimiento.
Preparándose para ver el mercado crecer
De 2016 a 2017, el comercio electrónico creció un 25 por ciento en México, aproximadamente 7.600 millones de dólares, según datos de emarketer. Se espera que ese fuerte crecimiento se acelere incluso más en los próximos años.
Actualmente, México cuenta con 60 millones de usuarios de Internet y 38 millones de compradores en línea, según un estudio reciente de eShopWorld. Se espera que el número de compradores en línea sobrepase los 55 millones en 2020 haciendo que las ventas electrónicas totales se dupliquen y lleguen a pasar los US $ 17.600 millones. Con una población de 128 millones, México es la segunda economía de América Latina después de Brasil.
Amazon, Walmart y Alibaba esperan cerrar en México la gran brecha entre el comercio por internet y el tradicional. Hoy, las compras en línea representan solo el 2 por ciento de los $ 203 mil millones de ventas minoristas anuales de la nación.
En 2016, el segmento de los dispositivos electrónicos personales fue el más grande del mercado minorista online de México y se prevé que la tendencia siga en aumento. Los servicios de viajes, incluidos la reserva de vuelos y de hoteles, representan el 54 por ciento del mercado mexicano de comercio electrónico, según el eCommerce Handbook 2017.
Como cabe esperar, los más propensos a usar plataformas de ventas por internet son los usuarios más jóvenes de zonas urbanas, señalando el que debe ser el objetivo demográfico claro de las campañas de marketing digital.
Sin embargo, existen importantes obstáculos para el crecimiento del comercio electrónico, que van desde la logística y los problemas de conectividad en zonas rurales de México, hasta el temible fraude financiero. Otro problema es que la mayoría de los mexicanos aún prefiere pagar en efectivo en vez de usar tarjetas bancarias. Para sortear este obstáculo MercadoLibre, que ha logrado posicionarse como referente en el mercado, permite que los consumidores realicen compras por internet en efectivo en las tiendas Oxxo.
Las conclusiones
Para los inversionistas estadounidenses e internacionales son muchos los sectores del comercio electrónico mexicano en los que invertir:
- Transporte. México se ha embarcado en un programa de modernización a largo plazo para sus autopistas, aeropuertos internacionales, ferrocarriles y puertos, con el que apunta a clasificarse en 2030 como país –junto con otros, conformando el 20% del Foro Económico Mundial con mejor índice de Competitividad de Infraestructura. Eso se traducirá en inversiones públicas y privadas tanto en la ejecución de los proyectos como en su asesoramiento y planificación.
- Logística. DHL Express domina el negocio del transporte de productos comprados online. Sin embargo, como muchas áreas de México carecen de un servicio de entrega rápido y fiable, eso le abre la puerta a otras empresas de logística dispuestos a desafiar a DHL.
- Finanzas. Pueden ser necesarias estrategias innovadoras para poner en confianza a los consumidores mexicanos. Un ejemplo son las tiendasquioscos en áreas urbanas, suburbanas o rurales, que funcionen como cajeros automáticos permitiendo a los consumidores comprar por internet utilizando dinero en efectivo aparte de tarjetas de crédito o de débito. Otro ejemplo son las pequeñas oficinas bancarias que ofrezcan la posibilidad de hacer transferencias a una tienda de internet.
- Torres celulares. Una conexión fiable, inalámbrica y de alta velocidad es básica. Los inversores podrían asociarse con los proveedores de servicios de datos y de telecomunicaciones mexicanos o con las empresas de infraestructura para seguir trabajando en construir la red de internet del país.
- Tecnología. Se necesitará invertir en teléfonos inteligentes, computadoras de escritorio o plataformas de publicidad digital. Los inversores internacionales deberán asociarse con empresas locales, conocedoras de los patrones de comportamiento del consumidor mexicano, para conseguir penetrar eficazmente en el mercado.
- Redes Sociales. Con más de 50 millones de usuarios activos en Facebook, México ofrece un terreno fértil para nuevas inversiones en marketing y publicidad. Las plataformas actuales de redes sociales están a disposición de los inversores que podrán aliarse con Amazon, Walmart y Alibaba, o desarrollar sus propios marcas, sitios web o aplicaciones.
Invertir con criterio en infraestructura física o digital en cualquiera de los sectores que redundarán en hacer crecer las ventas por internet en México, tiene el potencial de generar un retorno significativo.
