Más de la mitad de los trabajadores en México han estado en la informalidad en algún momento de su vida laboral, y lo que más aprecian en cada modalidad es el ingreso seguro y la flexibilidad de horarios, respectivamente, según reveló la Sexta Encuesta Anual de la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore).
En conferencia conjunta, Guillermo Zamarripa, director de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), identificó como causa de la alta movilidad entre formalidad e informalidad, a que “ambas tienen atributos y es necesario elevar los beneficios de la formalidad”, expuso.
Gerardo Esquivel, profesor e investigador del Colegio de México, destacó que la encuesta refleja que la informalidad entre la población económicamente activa (PEA), no siempre es por elección y se trata de un sector heterogéneo.
“Es importante entender el rol de la informalidad, que no siempre es por elección, sino es consecuencia de la falta de políticas públicas”, dijo, y expuso que ayudaría a reducir la informalidad el contar con un seguro de desempleo y elevar el salario mínimo.
En materia de pensiones, Carlos Noriega, presidente de la Amafore, identificó con los datos de la encuesta, la necesidad en México de un sistema global integral, que haya una pensión universal e incentivar el ahorro voluntario por parte de los trabajadores.
La encuesta reveló además que más allá de no pagar impuestos, la informalidad se ve incentivada por virtudes como la flexibilidad de horarios, y tres cuartas partes de los trabajadores informales estarían dispuestos a cambiarse a la formalidad a cambio de contar con prestaciones sociales como servicios médicos y pensión.