En un reporte que hoy reproducen medios de prensa locales, la entidad precisó que en ese lapso las ventas al exterior crecieron 19 por ciento al aproximarse a los 98 mil millones de dólares.
La rama que más ingresos aportó fue la de confecciones textiles (14 mil 600 millones de dólares, un aumento interanual del 11,3 por ciento) y también experimentaron fuertes alzas las verduras y frutas, caucho, té y petróleo crudo.
Pero por otro lado resultó preocupante que las importaciones crecieran 24 por ciento, un resultado que expertos atribuyeron a un mayor arribo de inversiones extranjeras directas.
Debemos admitir que las empresas vietnamitas aún no pueden participar en los procesos de alto valor en las cadenas de suministro, tales como el diseño de productos, comentó Tran Thanh Hai, viceministro de Industria y Comercio.
Los programas de construcción de las marcas nacionales y de desarrollo de las industrias auxiliares resultan insuficientes, y en el caso de la agricultura, la exportación enfrenta riesgos originados por las condiciones naturales, dijo.
Según la cartera, este año las exportaciones pudieron crecer del 10 al 11 por ciento al situarse en el orden de los 195 mil millones de dólares.
Para lograrlo, la estrategia consistirá en fortalecer la gestión del comercio exterior mediante instrumentos legales, impulsar los tratados de libre comercio, renovar la promoción comercial y aumentar la eficiencia frente a las políticas proteccionistas de otras naciones.
En el 2016 las exportaciones vietnamitas crecieron 8,6 por ciento, con comportamientos muy positivos de China y Estados Unidos (alzas interanuales del 26,5 y el 14,5 por cientos, en uno y otro caso).
Los productos que más vende la nación indochina son teléfonos y sus componentes, textiles y ropas, zapatos, vehículos y piezas de repuesto para estos.
Sus compras más importantes son maquinaria y equipos, instrumentos y piezas de repuesto, computadoras, productos y componentes electrónicos, acero, plásticos y materiales para ropa y calzado.