Reforma, Negocios / Capitanes, Redacción.
Crecen la tensión por la ratificación del Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC), porque el tiempo avanza y parece como si el Congreso estadounidense quisiera olvidarse del tema.
Donald Trump tiene toda su atención en la negociación de un posible acuerdo con China, al mismo tiempo que su equipo intenta cabildear a favor del T-MEC en el Congreso.
Allá el equilibrio de fuerzas políticas no es tan favorecedor a la Casa Blanca y el cabildeo realmente tendrá que ser muy intenso. Será por ello que hace unos días en una audiencia pública Robert Lighthizer, Representante Comercial de EU, casi suplicó a su Congreso a que apruebe el Tratado.
De parte del Gobierno mexicano, veremos si Jesús Seade, el subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte que intervino de forma exitosa en la última parte de la negociación, puede poner en práctica sus habilidades para empujar el tema en Washington.
En tanto, del lado canadiense, hay mucha inquietud porque EU no da señales de eliminar los aranceles al acero y aluminio. Eso puede entorpecer la ratificación.
Por lo pronto, el coordinador del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales (CCENI), Moisés Kalach, está enfocado en promover una coalición de empresas que busca promover la aprobación.