A pesar de la depreciación del peso de los últimos dos meses, los precios de la energía eléctrica a nivel industrial en México se han encarecido y son ya 15 por ciento más altos que el promedio en Estados Unidos, revela un análisis de Grupo REFORMA.
Con esto, el País perdió una ventaja momentánea, ya que en junio pasado la electricidad a nivel industrial en México llegó a ser 6.74 por ciento más barata que el promedio de Estados Unidos.
A nivel nacional, los precios promedio de la electricidad que ofrece la CFE a la industria, en la tarifa HM —que más de 87 mil empresas medianas y grandes le facturan—, es de unos 1.59 pesos por kilowatt-hora (kwh).
Convertida a dólares resulta en 0.0754 dólares por kwh, mientras que el promedio en el país vecino es de 0.0654 dólares por kwh, un 15.25 por ciento mayor.
La diferencia contra Estados Unidos fue de 12.21 por ciento más cara en diciembre, de 10.92 por ciento en noviembre y 11.77 por ciento en octubre.
Respecto a la tarifa HM ponderada de consumo en Nuevo León para enero, de 1.1958 pesos por kwh (0.0586 dólares por kwh), es un 20.15 por ciento más alta que en Texas, donde hoy se ubica en alrededor de 0.0487 dólares por kwh, según estimaciones y datos del Consejo de Confiabilidad Energética de Texas (ERCOT, por sus siglas en inglés).
De no haberse depreciado el peso frente al dólar casi un 12 por ciento desde el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses, la tarifa industrial en México habría sido 28.40 por ciento más alta hoy que la de ese país, y la de Nuevo León sería 33.86 por ciento mayor a las de Texas.
Para este mes, las tarifas eléctricas de CFE a las empresas acumuló un aumento de hasta 53 por ciento con respecto a las hace un año, derivado, principalmente, de un aumento en el precio de adquisición del gas natural que la empresa estatal importa en su mayoría para sus plantas termoeléctricas.
El costo del gas natural para la CFE fue de 73.3 pesos por millón de BTUs en diciembre del 2016 —con el que determinó los aumentos porcentuales para enero— un 77 por ciento más caro que los de diciembre del 2015, de 41.4 pesos.
El impacto se amplifica porque el energético se cotiza en dólares, y en el periodo citado, la depreciación del peso frente a esta moneda fue del 10 por ciento.
George McGuirk, especialista de la industria eléctrica de S&P Global Platts Bentek Energy, y Armando Llamas, director del Centro de Estudios de Energía del Tec de Monterrey, coincidieron en que esta brecha seguirá creciendo.
Esto debido a que los precios de los combustibles, que determinan el 80 por ciento del precio final de la luz en México, se reflejarán en lo que resta del año al alza.
Además del aumento en el tipo de cambio, las tarifas en México se han elevado más que en Estados Unidos debido a la alta dependencia que tiene la CFE para producir electricidad con gas natural.
Para Ramsés Pech, socio de Caraiva y Asociados, el problema de las tarifas de la CFE radica en que se aplican aumentos porcentuales homologados a todo el País, cuando en realidad éstos debieran reflejar los costos en cada zona de generación y consumo.