T-21. Tres importantes tratados comerciales, incluido el T-MEC, entrarán en vigor muy pronto durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, además, en menos de un mes la Zona Libre más grande del mundo operará en la frontera Norte, por lo que empresarios y el nuevo gobierno federal deben trabajar de la mano para que haya certidumbre en las leyes que rigen al sector de comercio exterior en favor de la economía y el empleo.
Desde que López Obrador dio a conocer su plataforma política y luego en las posturas referentes al comercio exterior, este nuevo gobierno se comprometió a diversificar el comercio internacional, aumentar el comercio con Asia y Europa 1, y en breve tendrá la responsabilidad de cabildear junto con el sector empresarial la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en el Congreso, tras la histórica firma del pacto el pasado 30 de noviembre.
Dicha ratificación del T-MEC será un proceso crucial para el gobierno federal entrante durante el 2019, pues se anticipa una complicada negociación al interior del Congreso de Estados Unidos al tener los demócratas la mayoría en la Cámara de Representantes.
En un escenario en el que todos los legisladores republicanos voten a favor de la aprobación del Tratado, el Partido Republicano requerirá contar con el voto favorable de 18 demócratas, por lo que se prevé que los demócratas a cambio de su voto exijan modificaciones a los compromisos pactados en el acuerdo.
En caso de que el Partido Demócrata impida la aprobación del T-MEC en la Cámara de Representantes, la relación comercial entre México y Estados Unidos continuará rigiéndose por lo previsto en el TLCAN, pero la incertidumbre sería un factor negativo para la inversión, por ello es necesario que el actual gobierno federal inicie en coordinación con el sector empresarial el cabildeo con los legisladores demócratas para que sea ratificado el acuerdo sin contratiempos.
Cabe recordar que otro acuerdo comercial importante es el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP, por su sigla en inglés), que entrará en vigor el próximo 30 de diciembre, con el cual se fortalecerá el comercio con Japón, Chile y Perú, además de una nueva apertura total con Australia, Nueva Zelanda, Singapur, Vietnam, Brunei y Malasia, el cual abrirá nuevos mercados tan necesarios para el comercio exterior mexicano. Así como el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, cuya firma se espera hasta la primavera del 2019.
LOS RETOS DEL NUEVO GOBIERNO
Sin duda uno de los retos del gobierno de López Obrador será que la ratificación del T-MEC no incluya cambios a lo ya pactado. E incluso ya el presidente Donald Trump ha manifestado públicamente su intención de denunciar el acuerdo y salirse del mismo a manera de presión interna para que sea aprobado por el Senado y la Cámara de Representantes, esta última instancia donde podría existir cierta oposición por parte de los legisladores demócratas.
Otra de las áreas de oportunidad para el próximo sexenio es que se trabaje en una regulación acorde a los nuevos tiempos de la era digital y que esté al nivel de los tratados comerciales que México ha suscrito con los distintos países de Norteamérica, Europa y Asia.
A días de que entre en vigor la reforma a la Ley Aduanera (22 de diciembre) tanto empresarios como expertos han conformado un frente en común para que el Congreso revise dicha norma y construya una nueva Legislación, pues si se queda como está, esto no permitirá fomentar el comercio exterior en tiempos donde se requiere ser competitivo ante el T-MEC.
Recientemente se presentó una iniciativa de Reforma de la Ley Aduanera, la cual tiene la intención de ampliar el plazo de entrada en vigor de la propia Ley, con excepción de la figura novedosa de las Agencias Aduanales que, al representar un valor agregado para el comercio exterior mexicano, es importante entre en vigor el 22 de diciembre de este año.
La motivación de la prórroga que se está pidiendo en la Reforma destaca la necesidad de contar con el tiempo suficiente que permita a los usuarios de comercio exterior, las autoridades y los legisladores, diseñar una Ley moderna, incluyente, y equilibrada que adopte las mejores prácticas internacionales, reduzca las cargas administrativas y agilice el comercio exterior mexicano 2, que permita al empresario nacional tener un acceso eficiente a los 13 tratados que tiene suscritos México con 52 países, una Ley que incluya conceptos que permitan al comercio digital entrar en plenitud en México, recordemos que el paradigma de la territorialidad aduanera está siendo superado, lo que se traduce en un gran reto para nuestro país.
Ante la cuarta transformación, los organismos empresariales, académicos, especialistas se sumaron para que se realicen las modificaciones a la reforma a la Ley Aduanera que fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el pasado mes de junio, pero que reforma una Ley que tiene sus orígenes en la década de los 90, es decir, del siglo pasado y que ha sufrido alrededor de 16 actualizaciones intentando adaptarse a la modernidad logística aduanera, pero encontrándose reiteradamente un paso atrás.
Al pactar México el T-MEC, el CPTPP, así como el TLCUEM, se requiere una Ley Aduanera que invite a la facilitación aduanera, que establezca de forma clara y precisa los extremos de los derechos y obligaciones de los usuarios de comercio exterior, así como las atribuciones y facultades de la autoridad.
La reforma actual contiene una serie de disposiciones subjetivas que permitirían su aplicación de manera discrecional en la operación aduanera y ello podría fomentar corrupción, lo que se vería reflejado en una complejidad que impacta a un sector que representa el 70% del PIB nacional, y millones de empleos. Por ello la importancia de tener marcos regulatorios de cara a los próximos 30 años que permitan a México crecer en materia de comercio exterior y aduanas.
LA ZONA LIBRE MÁS GRANDE DEL MUNDO
A partir del primero de enero de 2019 entrará en función una zona franca en la frontera norte, con la cual se reducirá el Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 16 al 8% y el Impuesto sobre la Renta (ISR) bajará de 30 a 20%, con la finalidad de disminuir el flujo de migrantes hacia Estados Unidos además de igualar los costos de combustible con el vecino país, y duplicar el salario mínimo en la región fronteriza.
Durante décadas el sector empresarial de la frontera norte ha demandado el establecimiento de un esquema económico que reconozca las diferencias con las que trabajan respecto a las del centro de la República, por lo que se pretende que sea una franja que incluya a todos los estados, que tenga incentivos fiscales para atraer inversión, aporte tecnología, que eleve el poder adquisitivo y que mejore las condiciones de bienestar de los ciudadanos de la región.
Durante el proceso de transición la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo me permitió el honor de apoyar con el desarrollo de mesas de análisis empresariales en la frontera norte, dichas mesas se llevaron a cabo con éxito desde el Pacífico hasta el Golfo de México siendo lideradas por el equipo de la Confederación, permitiendo integrar un documento donde se establecen propuestas para que se consolide la llamada Zona Libre, las cuales contemplan el desarrollo y la rehabilitación de infraestructura que garantice la comunicación interregional del norte, que detone el crecimiento de la frontera a través de autopistas, carreteras, puertos y áreas de almacenamiento, aeropuertos de carga, transporte ferroviario y marítimo, así como la optimización y creación de puentes internacionales 3.
Sin duda, en materia de infraestructura se planteó la necesidad de tener parques industriales con todos los requerimientos logísticos de servicios, mobiliario, de equipamiento urbano, conectividad tecnológica, movilidad de personas, bienes y servicios.
Se requiere atender la vocación de especialización inteligente en los campos de innovación y tecnología de la región e incorporar la cooperación con los polos científicos y académicos transfronterizos, todo ello con el fin de que la Zona Libre no solo sea un régimen fiscal, sino sea un esquema integral que reactive la economía fronteriza.
Hay que recordar que este esquema económico de la Zona Libre se estableció por primera vez en Tijuana y Ensenada en 1933. Dicho régimen también existió en Tamaulipas, donde había concluido en 1905, bajo el gobierno de Porfirio Díaz. Ya en 1939 los bajacalifornianos fueron favorecidos con una versión más moderna de este régimen, conocida como zona libre, misma que se extendió a una parte de Sonora 4.
Su ampliación fue el resultado de un constante reclamo de los empresarios locales, que pugnaban por un modelo de crecimiento económico apropiado a las características de la región y, sobre todo, a las necesidades de competitividad en relación con el mercado de California.
Ese mecanismo arancelario fue la base de la política regional de buena parte de la vida económica de la región, desde los años treinta y hasta mediados de los sesenta en una primera etapa, pero incluso llegó a ampliarse hasta principios de los años noventa.
Bajo el régimen de perímetro y de zona libre, el gobierno federal pretendió fortalecer la presencia nacional en el territorio norte y, posteriormente en Baja California, además contribuyó al fortalecimiento del sector comercial, por lo que se espera que ahora sea el motor económico de la toda la franja fronteriza.
Sin embargo, el nuevo gobierno federal debe también contemplar que se perderá una recaudación de ingresos de alrededor de 40 mil millones de pesos, por lo que las propuestas elaboradas por los empresarios de la frontera norte están encaminadas a contar con una estrategia para aminorar los impactos que pudiera representar este hoyo fiscal en los programas económicos y sociales.
Dicho esquema establece en el tema arancelario que productos como ropa, calzado, electrónicos y todos los productos que los fronterizos están acostumbrados a comprar en las ciudades vecinas de Estados Unidos puedan ser encontrados y comprados en la región a precios más bajos o similares.
Es muy importante que se hayan definido las reglas de la Zona Económica Fronteriza para que los empresarios que se ahorrarán un porcentaje en el pago de impuestos trasladen ese beneficio al consumidor final.
Por lo pronto este es el escenario que se espera para el corto plazo durante este nuevo gobierno federal, será importante que haya certidumbre fiscal para poder avanzar en el sector.
Para quienes deseen mayor información sobre este y otros temas de comercio exterior pongo a su disposición amigo lector la página de internet www.tlcasociados.com.mx.
REFERENCIAS:
1 Posicionamiento sobre la conclusión de la negociación trilateral del Tratado Estados Unidos-México-Canadá (USMCA), octubre 1, 2018.
https://lopezobrador.org.mx/?s=comercio+exterior+
2 Iniciativa que reforma el artículo primero transitorio del decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley Aduanera, publicado en el DOF el 25 de junio de 2018, Gaceta Parlamentaria, año XXI, número 5159-II, martes 20 de noviembre de 2018.
3 Dialogan presidentes de Cámaras de Comercio de la frontera norte sobre la zona libre, 20 de septiembre, 2018.
http://www.concanaco.com.mx/dialogan-presidentes-de-camaras-de-comercio-…
norte-sobre-la-zona-libre/
4 Historia Económica y Desarrollo de la Zona Libre de la Península de Baja California, Revista del Instituto de Investigaciones Históricas de la UABC, Meyibó, año 5, número 10, julio-diciembre de 2015.
http://iih.tij.uabc.mx/iihDigital/MeyiboCap/Num10/Historia%20economica.pdf
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