- Desde la cámara recordaron que se han perdido casi 100,000 empleos en los sectores textil y de la confección debido a las prácticas irregulares de competidores asiáticos.
La propuesta gubernamental de aumentar aranceles hasta 50% a productos chinos y otras naciones con quien México no tiene acuerdo comercial resulta “oportuno” para que la industria textil y confección recupere casi 100,000 empleos perdidos por la ilegalidad, con la estrategia de sustituir importaciones de telas y prendas de vestir de países de oriente, así como etiquetar con lo “Hecho en México”, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex), Rafael Zaga Saba.
De aplicarse el arancel del 10 hasta 50% a las importaciones de oriente representaría un “rescate” para la industria nacional que arrastra más de 10 trimestres consecutivos negativos en el PIB manufacturero nacional y 950,000 empleos perdidos en el lapso de dos años, aseveró el industrial.
En entrevista con El Economista, el presidente de la Canaintex precisó que la mayoría de las fracciones de la cadena textil y confección en México tienen proyectado un arancel de 35%, y algunas telas como la lana del 50%.
Expresó: “estamos totalmente encarrilados a recuperar los empleos perdidos de los últimos dos años y a que la capacidad de las fábricas opere al 100% de su capacidad (hoy cuentan con una capacidad del 60%)”.
El plan es que México recupere la posición de potencia mundial en diversos productos como el de jeans. Zaga Saba recordó que “1 de cada 3 pantalones de caballero que se comercializan en el mercado más grande del mundo, Estados Unidos, son hechos en México y ese producto, está elaborado desde el algodón hasta los jeans, y tendrán el beneficio de ser 100% nacionales o cualquiera que quisiera competir, pues va a tener que pagar un arancel más alto”.
Insistió que la imposición de aranceles que se sometió al Congreso y que la industria confía en que se avalado, “le cae como anillo al dedo puesto que podemos hacer un producto que es 100% nacional, 100% en México con una derrama económica desde el campo hasta el aparador y con manos mexicanas”.
De la cadena textil confección, 1,400 fracciones tendrán impuesto en promedio del 35%, por lo que la Canaintex trabaja con el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, y con Luis Rosendo, el subsecretario de Comercio Exterior para estudiar cuántas fracciones arancelarias se podrá sustituir y que la industria pueda cubrir esa demanda.
Incluso, como parte del Plan México, industria textil se comprometió a invertir 2,800 millones de dólares hacia el 2030 para fortalecer el mercado interno con la marca “Hecho en México”, atender las compras de gobierno y reforzar las exportaciones de Norteamérica,
Apenas el año pasado, la industria textil aseguraba que la ilegalidad habría arrebatado el 60% del mercado formal, con programas de comercio exterior como el IMMEX, que importan productos con beneficios fiscales diseñados para transformación, manufactura y reexportación, pero en realidad los desvían al mercado nacional sin pagar impuestos.
El presidente de la Canaintex confió, a la par, en que se realicen los cambios en las aduanas para limitar la posibilidad de triangulación o contrabando.