El algodón, en alerta: ni una recuperación rápida logrará reflotar los precios

La recuperación tardará en llegar al algodón. Ni siquiera en un caso de recuperación “moderada” en el que las medidas de contención en todo el mundo se levanten pronto, los elevados niveles de stock acumulados estos meses continuarán presionando a la baja los precios durante al menos dos campañas, según un informe publicado este mes por el Comité Consultivo Internacional del Algodón (Ccia).

El Gran Confinamiento, como ha denominado el Fondo Monetario Internacional (FMI) a la congelación de la economía global por la pandemia del coronavirus, ha impactado a lo largo de toda la cadena de valor del algodón: de las plantaciones al consumo y los precios.

“El consumo de algodón y el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) están correlacionados”, destaca el Ccia en su informe Impacto en el mercado del algodón del cierre por el Covid-19. La entidad estima que si la economía se encoge un 3%, como prevé el FMI, el consumo de algodón caiga un 11%.

El informe trabaja con dos escenarios: una recuperación moderada, en la que los negocios puedan recuperar rápido su actividad, aún con restricciones, y una más lenta, si las medidas estrictas de contención permanecen vigentes y las políticas públicas resultan ser “débiles o ineficaces”.

Pero incluso el primer escenario presenta un horizonte bastante negro para la materia prima favorita de la moda. “Es probable que los precios que ya están bajo presión permanezcan bajos incluso sin crecimiento del consumo, ya que las existencias están en cifras récord”, destaca.

Otro factor que presionará a la baja los precios del algodón es la deflación del poliéster. “Si se sigue ampliando la brecha de precios entre el algodón y el poliéster, se reduciría la competitividad del algodón y disminuiría su participación mundial en el consumo de fibras textiles”, subraya el Ccia.

La caída de precios impactaría en las decisiones de siembra para la temporada 2021-2022

Esta caída de los precios condiciona también la evolución de la producción. Si la recuperación fuera lenta y los precios continuaran bajando, impactaría duramente en las decisiones de siembra para la temporada 2021-2022.

“Los productores verían pocos incentivos financieros y la probabilidad de una crisis alimentaria incrementaría el valor de los cultivos alimentarios, especialmente para los pequeños productores en África Occidental e India”, destaca el documento.

Los fabricantes de tejido y prendas, por su parte, se juegan directamente su supervivencia. “La fabricación de textiles y prendas de vestir en el Sudeste Asiático está dominada por pequeñas y medianas empresas”, dice el Ccia. “Si se pueden reanudar los pedidos, incluso a un ritmo más lento, estas pymes pueden ser capaces de sobrevivir, pero no si la recuperación se extiende más allá de este año”, destaca.

Sólo mantener el stock que no se ha movido durante estos meses representa un coste de unos 16 millones de dólares al mes

Por último, el comercio de algodón y prendas de vestir no se enfrenta a un escenario más halagüeño. “Se espera que las perspectivas a corto plazo para la industria textil y de prendas de vestir sean sombrías”, reconoce el informe. Sólo mantener el stock que no se ha movido durante estos meses representa un coste de unos 16 millones de dólares al mes.

“Las pérdidas para el sector comercial causadas por las cancelaciones de contratos vinculadas al Covid-19 probablemente harán que más empresas abandonen la industria del comercio de algodón”, vaticina.

La receta del Ccia

El Comité Consultivo del Algodón da a sus asociados tres recomendaciones para hacer frente a la recuperación. En primer lugar, la organización recalca que el cumplimiento de los contratos es “fundamental” para que los mercados “funcionen correctamente”.

Además, propone a los Gobiernos “medidas de estímulo y apoyo financiero” a pequeñas y medidas empresas, incluyendo préstamos, subvenciones y créditos para asegurar su liquidez. Por último, alerta a sus asociados que “tengan cuidado” con los subsidios agrícolas, porque podrían tener consecuencias imprevistas como una mayor caída de los precios debido al aumento de la oferta.

Comparte este contenido:

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest

Bóxers

Pantalones de mezclilla para caballero (2a edición)