Tras 61 años de operaciones, Akra Monterrey, productora de filamentos textiles e industriales, y propiedad del grupo industrial Alfa, cerrará sus operaciones ante la falta de viabilidad para seguir compitiendo contra China, que maneja el 95 por ciento de la producción global.
Pero también frente a una creciente sobreoferta mundial que hasta ahora se estima en alrededor del 25 por ciento respecto al consumo de estos insumos.
Se trata de la planta que está ubicada en la Avenida Ruiz Cortines, que apenas en el 2022 celebró su 60 aniversario y al año facturaba unos 135 millones de dólares, exportaba el 60 por ciento de su producción -básicamente a Estados Unidos- y en la que laboran unos 700 trabajadores.
Esa plantilla representa el 9.7 por ciento del total de trabajadores que tiene Alpek -su controladora directa- a nivel mundial.
Las cuantiosas inversiones que realizó Alfa para mejorar su productividad, no alcanzaron para competir frente al crecimiento exponencial de más de 25 veces que tuvo China, que en las últimas dos décadas aumentó su producción de 2 millones a 50 millones de toneladas anuales con plantas más modernas.
Gustavo Talancón, director general de Akra Polyester, indicó que la empresa analizó diversas alternativas antes de tomar la decisión de cierre de la planta.
Refirió que la escala productiva que alcanzó China en filamentos de poliéster es tan alto que si todos los productores del mundo cerraran, ese país podría abastecer toda la demanda global.
“Invertimos mucho en los últimos años para mejorar nuestra competividad, pero simplemente no alcanzó.
“Se le insistió mucho al negocio, pero hubo un fuerte deterioro en los últimos años y lo más importante es que hacia delante seguirá habiendo nueva capacidad… entonces llegamos a la decisión de que ya no es viable, se le intentó todo (incluso vender)”, explicó.
“Si hubiéramos visto un poco de luz hacia delante valdría la pena seguir invirtiendo”, enfatizó.
Talancón refirió que hace años en México había seis productores de filamentos, los cuales fueron desapareciendo ante la competencia china.
Sobre el impacto económico que representará el cierre de la planta, Talancón indicó que esas pérdidas serán reconocidas dentro del grupo (Alpek y Alfa).
Aclaró que las operaciones de Akra en Altamira, Tamaulipas (en las que produce PTA y PET), seguirán con normalidad.
Refirió que ayer inició la notificación del cierre de la planta en Monterrey a los trabajadores y que, por los compromisos de producción que tiene, el paro será gradual iniciando el 1 de septiembre para finalizar a principios del 2024.
Destacó que para apoyar al personal, la empresa realizará una feria de empleo.
Resaltó que los trabajadores recibirán liquidaciones por encima de la ley, no obstante que la legislación permite a Akra recortar esas prestaciones.
“Nosotros (en Alfa) siempre hemos liquidado por encima de ley y ahorita, a pesar de los números rojos que traemos, vamos a seguir”, aseguró.
Akra también apoyará a sus trabajadores con la regularización de cuentas de Infonavit, con jubilación adelantada a quien sea candidato y asesoría para jubilación ante el IMSS, además de asistencia médica, psicológica y en finanzas personales.