El ‘dumping‘ se refiere a la práctica de vender por debajo del precio normal o a precios inferiores al coste, con el fin de eliminar a la competencia y adueñarse del mercado.
Esta semana, la Organización Mundial del Comercio (OMC) ha publicado un documento en el que señala que el gigante asiático quiere evitar que las medidas ‘antidumping’ tengan un “alcance excesivo” y se conviertan en permanentes, tomando en consideración a las pequeñas y medianas empresas, e imponiendo estándares más fuertes para el uso de este tipo de tarifas.
Los analistas han señalado que es poco probable que la propuesta de China obtenga un apoyo unánime por parte de los miembros de la OMC y podría ser rechazada por Estados Unidos, a través de Wilbur Ross, secretario de Comercio.
De acuerdo con lo que han señalado algunos especialistas, el objetivo de esta propuesta es desviar la atención de los subsidios pesqueros chinos, que están siendo objeto de controversia en las negociaciones en la misma comisión de la OMC.
La presión global que existe actualmente sobre las pesqueras es muy elevada, porque uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU se centra en eliminar ciertos subsidios para el año 2020, y muchos diplomáticos comerciales esperan que haya un acuerdo en la reunión ministerial que celebrará la OMC en diciembre.
China ha sido acusada en varias ocasiones de subsidiar, de forma injusta, a su enorme flota pesquera y ha buscado, con el apoyo de India y de Rusia, ligar las negociaciones sobre pesca en la OMC a una reforma más amplia de las reglas sobre el uso de tarifas para contrarrestar las prácticas comerciales injustas.
En 2014, Estados Unidos dijo a la OMC que China tenía 30 programas no declarados de apoyo a las pesqueras, exigió más transparencia y acusó al gigante asiático de moverse lentamente.
Por otro lado, Estados Unidos entregó un documento a la OMC detallando los programas económicos que, de acuerdo con la percepción de Washington, China debería haber notificado al organismo